El abuso va más allá de la violencia física. Poner fin al daño y al estigma de la violencia doméstica requiere una aguda comprensión de las conductas que la definen, así como ejemplos de relaciones saludables para tomar decisiones y tener interacciones informadas en el futuro. Nuestros asesores están disponibles 24 horas al día, 7 días a la semana, por teléfono y chat en vivo para discutir su situación y ayudarle a determinar si su relación podría ser abusiva.

Definición de abuso

La violencia doméstica, también conocida como violencia de pareja íntima (IPV, por sus siglas en inglés), abuso de pareja o relación abusiva, es un patrón de comportamiento utilizado por una persona para mantener el poder y el control sobre su pareja en una relación íntima.

La violencia doméstica no discrimina. Personas de cualquier raza, edad, género, sexualidad, religión, nivel de escolaridad o situación económica pueden ser víctimas (o perpetradores) de violencia doméstica. Esto incluye conductas que causan daño físico, intimidan, manipulan o controlan a una pareja, o que de otro modo la obligan a comportarse de ciertas maneras, incluso a través de violencia física, amenazas, abuso emocional o control financiero. Por lo general, hay múltiples formas de abuso presentes al mismo tiempo dentro de una relación abusiva, y es esencial comprender cómo interactúan estas conductas para que sepa qué debe notar.