Seguridad en Internet
Manténgase a salvo seguro. Manténgase conectado.

Las computadoras almacenan información sobre los sitios web que visita. Esto significa que las facturas que paga y las compras que realiza son rastreadas, y los mensajes o correos electrónicos pueden ser recuperados. Siempre debe tener en cuenta que una computadora puede ser monitoreada mientras la usa y debe tener cuidado con lo que envíe a otros o publique. Puede encontrar computadoras seguras en su biblioteca local, cibercafé, refugio, lugar de trabajo o centro de tecnología informática; evite usar computadoras compartidas cuando investigue cosas como planes de viaje, opciones de alojamiento, asuntos legales y planes de seguridad. El uso de las prácticas de navegación seguras —como usar una red privada virtual (VPN, por sus siglas en inglés)— puede ayudar a evitar que las parejas abusivas rastreen su historial de Internet.

El correo electrónico puede ser una manera útil de mantenerse en contacto con amigos de confianza y miembros de la familia que pueden estar al tanto de su situación. Es probable que una pareja abusiva lo sepa y pueda tener acceso a su cuenta de correo electrónico sin que usted lo sepa. Para mayor seguridad, abra una cuenta que su pareja no conozca en un equipo seguro y utilice ese correo electrónico para llevar a cabo su plan de seguridad y las comunicaciones confidenciales. Utilice varios métodos diferentes de comunicación cuando se ponga en contacto con otras personas para saber si intentaron contactarle en otro lugar, y manténgase usando la cuenta monitoreada para correos electrónicos irrelevantes, a fin de guardar las apariencias. Los servicios de correo electrónico cifrados pueden ofrecer un nivel de seguridad adicional.

A medida que la tecnología ha evolucionado, los teléfonos celulares se han incorporado cada vez más en nuestra vida diaria. Esto proporciona acceso rápido a recursos e información, pero también puede proveerles a otras personas actualizaciones instantáneas sobre su paradero, hábitos y actividades. Los teléfonos celulares se pueden usar para rastrear su ubicación y recuperar el historial de llamadas y mensajes de texto. Si tiene una relación abusiva, considere comprar un teléfono prepagado y mantenerlo en un lugar seguro para llamadas privadas. Utilice una contraseña en su teléfono y actualícela con regularidad. Si le preocupa que su pareja pueda estar monitoreando su teléfono en secreto, considere llevarlo a un centro de servicio de telefonía celular para comprobar si hay un programa espía instalado.

Las publicaciones en las redes sociales nunca son realmente privadas, sin importar su configuración: una vez que están en línea, ya no están bajo su control. Proteja su información personal y recuerde que los números de teléfono, las direcciones, los controles y los datos personales (como la fecha de nacimiento, las escuelas a las que asistió, los patronos y las fotos con lugares emblemáticos) pueden facilitar que alguien se ponga en contacto con usted. Establezca barreras y límites, y pídales a las personas que no publiquen información personal, fotos o registros que le causen incomodidad. Compruebe la configuración de las redes sociales para asegurarse de que los ajustes de privacidad sean estrictos y deshabilite la posibilidad de que otras personas le etiqueten en sus fotos o publicaciones. Del mismo modo, no publique información sobre personas sin el consentimiento de éstas; podría poner en peligro su seguridad o la de otras personas.