Consentimiento en una Relación Comprometida
Consentimiento es una palabra que se menciona con mayor frecuencia al principio de una relación o cuando inicia la intimidad sexual. Muchas personas piensan que el consentimiento debe ser el enfoque durante las primeras etapas de una relación a medida que descubres hasta dónde te sientes incómodo. Si bien es importante tener conversaciones sobre consentimiento al principio, vale la pena seguir conversando sobre el consentimiento aún cuando es una relación de larga duración.
¿Por qué es importante el consentimiento en las relaciones de larga duración?
El consentimiento saludable es un acuerdo mutuo continuo entre parejas sobre lo que quieren y no quieren experimentar. El hecho de que conversan de consentir a una acción en particular una vez (por ejemplo, tu pareja pide prestado tu carro) no significa que tu pareja consiente a esta acción para el resto de la relación.
Cómo nos sentimos acerca de las cosas y nuestra comodidad puede cambiar a diario. Es por ello que el consentimiento es una conversación continua. A medida que envejecemos y se desarrolla nuestra relación, nuestras necesidades o deseos pueden cambiar– incluso por un breve periodo de tiempo– así que nunca debemos asumir que una persona está cómoda con una acción porque ya se hizo una vez.
¿Cómo practicas el consentimiento? El consentimiento requiere tres cosas: preguntas, respeto y confianza.
Para entender el nivel de comodidad de tu pareja con una determinada acción, es importante hacer preguntas. Ser claros y concisos sobre lo que estás preguntando ayuda a la persona saber exactamente lo que quieres. Por ejemplo: “¿Estaría bien utilizar tu carro de 2 a 4 de la tarde el sábado para hacer mandados?” Es una excelente manera de preguntar si alguien se siente bien con una determinada acción. Expresas claramente lo que quieres y la otra persona entiende fácilmente y puede responder.
El respeto es necesario porque necesitas respetar la respuesta de la otra persona. Al expresar su nivel de comodidad, tu pareja puede establecer un límite físico, emocional, sexual, material, intelectual, o de tiempo. Respeta lo que te dicen y el límite que pongan.
La confianza es crucial porque permite que las personas se sientan cómodas expresándose con honestidad. Si alguien confía en ti, puedes hablarles con franqueza y saber que respetarán tus necesidades y límites. Esto permite que las personas seamos más sinceras al expresar nuestros verdaderos sentimientos.
El consentimiento es una parte de las relaciones sanas que siempre permanece. Debido a ello, debe ser una conversación continua en tu relación. Si sientes que las cosas han cambiado en tu relación a medida que pasa el tiempo, o sientes que tu pareja ya no te pregunta si te sientes cómodo con algunas acciones, puede significar que las cosas están volviéndose poco saludables.
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